Creo firmemente que encargarle a alguien que cuente nuestra historia o la de nuestros allegados, no es algo que deba hacerse rápido ni a la ligera. Tanto si nos vamos a casar como si pretendemos dejar constancia de cualquier evento o efeméride importante para nosotros, la elección del profesional que plasmará esos acontecimientos debería sopesarse con mucho cuidado para evitar futuras sorpresas.
Como apasionado que soy por contar historias, decidí crear este vídeo para poder mostraros cómo de cierta es mi afirmación, de dónde me viene esa pasión, cómo se fue construyendo poco a poco, qué he conseguido desarrollar gracias a ella y cuál es mi grado de implicación con la creación de cada historia. También considero que debe servir para cribar y acercar a las personas que comparten mi amor por las historias -y las valoran como yo creo que se merecen- y a alejar a aquellas para las que, quizá, no sea algo tan importante y prefieran otro tipo de producto audiovisual y/o profesional del medio, cosa que respeto al 100%. Mi planteamiento solo pretende ahorrar a ambas partes lo más valioso que tenemos: nuestro tiempo.
Por todo lo anterior, y antes de que os encontréis en la tesitura de contarme vuestras historias, he decidido adelantarme, romper el hielo y contaros yo la mía. Espero que os guste y os sirva de ayuda.